Era una paloma de luces caminantes entre espinas y algas de amores crepusculares, donde solo podían descansar en senderos, las aves que anidaban en riberas de remanso, pero no puedo entender como sus plumajes mojados de luces, elevaban sus cantos sobre rocío de odio.
Tu, verde Paloma, eres una dama cuando te elevas sobre pensamientos y hojarascas de hierros, cuéntame porque olvídate aquellos amaneceres caribeños, sin mi pesadilla de gorilas, así me soñate. De la manera más cruel, dibújate mi aroma
Hola tierna Paloma, hoy camínate como siempre entre humos y mentiras, como para despertar en mi, ofensas, como para digitar lámparas de un hasta nunca, fue tan inhumana en su amar, que abrigó en su pico el trinar de mi dolor, pero, la Paloma pronunció su himno a la alegría, a la libertad de VOLAR Y VOLAR, hasta que yo despertara fuera de su vegetal laberinto
Para mi fue una linda noche de ensueño, ese espacio que viví y compartí, donde deje que los árboles de mi vida flotaran en el amanecer de su tenue corazón, quien tanto amo, que de repente siguió cantando aun con su alma destrozada sin espejos, sin peregrinas acuarelas y estrofas ni versos, que madrugaban en una esquina de su linda e intoxicada voz
Pero Paloma, estoy despierto o sigo en el océano de mi oscuridad, porque cuando te elévate deje de soñarte, deje que tu plumaje vomitara la ira que poblaba el alcantarillado de tu equivocado sonido de extranjeros sutiles. Y cuando intento despertar estoy encima de un caballo de sabana y almohada y mentiras.
Autor :
05 de Otoño, 2010
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